domingo, 5 de julio de 2015

IV

Tú te has empeñado en buscarme
sin bombonas, a pulmón,
agua adentro una y otra,
día tras día y ni rastro..

Primero en el muelle,
con caña vulgar y paciencia
mucha paciencia,
y luego las redes, los barcos
y otros métodos sofisticados
que fuiste escogiendo
según los fracasos

y así uno por uno,
todos los charcos
las aguas pantanosas y los mares
que fueron allanados
en mi busca
te parecieron insuficientes
y seguías queriendo más,
sin importar las pérdidas
y las bajas.

-y da igual por más velero
o por más yate
que intentaras,
por más técnica avanzada:
yo nunca fui pez de orilla.

Hubieras necesitado un leviatán.